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Comorbilidades más frecuentes en insuficiencia cardíaca y precauciones a tener en cuenta
- 18 marzo, 2021
- Posted by: cicero
- Category: Enfermedad
Las recientes actualizaciones sostienen que la insuficiencia cardíaca se presenta en el 2,7% de los españoles mayores de 45 años. Su incidencia es aún mayor, prácticamente un 9%, en el caso de los mayores de 74 años. A su vez, es común, que las personas afectadas por la IC presenten a su vez comorbilidad que interfiere en su proceso asistencial.
La comorbilidad se define como “cualquier entidad clínica que ha existido o que podría ocurrir durante el curso clínico de un paciente que tiene una enfermedad índice bajo estudio”. [i]En este sentido es necesario distinguirlo de multimorbilidad, término que hace referencia a la presencia de varias patologías en una misma persona sin que haya causa o efecto entre ellas.
Peculiaridades de la presencia de comorbilidad en IC
Se estima que 6 de cada 10 personas con insuficiencia cardíaca, están diagnosticadas con al menos 5 enfermedades crónicas asociadas. La prevalencia de comorbilidad es, por tanto, bastante frecuente.
La relevancia de la presencia de comorbilidades en insuficiencia cardíaca reside en:
- Interfiere en el proceso asistencial de la IC.
- Agravante de la IC.
- Mayor carga hospitalaria y recursos sanitarios.
- Se ha observado una mayor limitación en cuanto acceso terapéutico y e inclusión en ensayos clínicos en personas que presenten comorbilidad.
- La presencia de comorbilidad puede ser causa o efecto de la IC.
- La coexistencia de diversas enfermedades favorece la progresión de cada una de ellas individualmente.
- Empeoramiento de la calidad de vida del paciente.
- En cuanto al abordaje terapéutico encontramos dos aspectos:
- Determinados tratamientos de comorbilidades pueden provocar un empeoramiento de la IC.
- Interacción: incompatibilidad, perdida de eficacia, mayor efectos adversos, etc.
Retos asistenciales comorbilidad – insuficiencia cardiaca
La peculiaridades asociadas a las personas con IC que a su vez presentan comorbilidad plantean ciertos retos en su abordaje asistencial. Estas particularidades se podrían traducir en:
- La interacción farmacológica puede conllevar a un empeoramiento de la patología.
- Limitaciones en el abordaje. Ciertos tratamientos de una patología en concreto pueden ser contraproducentes o incompatibles en caso de que el paciente presente cierta comorbilidad.
- Efectos adversos.
- Riesgo de polimedicación sin que suponga beneficio real para el paciente.
- Empeoramiento de este tipo de pacientes al presentar mayor riesgo de hospitalización, reingreso y una tasa de mortalidad más elevada.
En este sentido, se hace necesario un mayor conocimiento de la comorbilidad en el paciente con IC que permita:
- Establecer qué patologías son prioritarias en cuanto a su abordaje en el caso que se presenten 2 o más enfermedades.
- La puesta en marcha de procesos asistenciales concretos y específicos para personas que presenten dos o más patologías relacionadas entre ellas, en lugar de recibir tratamientos estandarizados.
- Optimización de los recursos disponibles, no priorizando aquellos que presenten un beneficio directo para el paciente, siendo innecesarios en su caso.
- Minimizar riesgos asociados.
- Identificación y análisis de subgrupos de los pacientes de forma que se mejore el manejo de la presencia conjunta de ciertas patologías.
¿Cuáles son las comorbilidades más frecuentes en insuficiencia cardíaca?
En una de las últimas guías de práctica clínica, se recogen las diferentes comorbilidades más comunes en pacientes con IC. La hipertensión y la cardiopatía isquémica son las que se presentan con mayor frecuencia en los pacientes con IC. En tercer lugar, y para el caso de los mayores de 65 años, la hiperlipidemia se presenta en el 40% de la población; y, en menores de 65 años, en cambio, es la diabetes la patología más frecuente.
Atendiendo a aquellas comorbilidades no cardiovasculares, entre las más frecuentes se podrían situar la anemia, la diabetes, la insuficiencia renal o la EPOC.
Mayores de 65 años | Menores de 65 años | ||
Hipertensión | 84,2% | Hipertensión | 80,7% |
Cardiopatía isquémica | 71,9% | Cardiopatía isquémica | 64% |
Hiperlipidemia | 60% | Diabetes | 59,2% |
Anemia | 50% | Hiperlipidemia | 56,9% |
Diabetes | 46,3% | Anemia | 49,7% |
Artritis | 43,5% | Insuficiencia renal | 45% |
Insuficiencia renal | 42,3% | Depresión | 36,2% |
EPOC | 30% | Artritis | 35,3% |
Fibrilación auricular | 28,5% | EPOC | 33,4% |
Alzheimer/demencia | 27,6% | Asma | 15,5 |
Tabla modificada de Centers for Mediacare & Medicaid Services administrative claims data, January 2011 to December 2011, from the Chronic Condition Warehouse. Disponible en: http://eguideline.guidelinecentral.com/i/244042-heart-failure-2017-update/49?
Déficit de hierro y anemia
La falta de hierro y hemoglobina es común en el paciente con IC. Se estima que la anemia está presente en 1 de cada 2 pacientes. Las alteraciones que los pacientes con IC presentan en la asimilación de nutrientes de los alimentos podrían explicar el hecho de que sus niveles de hierro y hemoglobina sean más bajos de los recomendados.
Se hace necesario un adecuado control y abordaje en caso de detectar este déficit, ya que de lo contrario, presentan mayor riesgo de ingresos hospitalarios y complicaciones.
Diabetes
Se estima que un hombre con diabetes su riesgo de desarrollar IC es 2,5 veces mayor si lo comparamos con el resto de la población. En mujeres, este riesgo puede llegar a ser hasta cinco veces mayor. Los estudios demuestran la estrecha relación entre la diabetes y el desarrollo de enfermedades cardiovasculares o, en su defecto, factores de riesgo asociados a estas. A su vez, tal y como analizamos en el post Insuficiencia Cardíaca y diabetes: ¿causa y efecto?, la insuficiencia cardíaca es considerada factor de riesgo en el desarrollo de diabetes.
Insuficiencia renal
Las personas con enfermedad renal crónica, entre las patologías cardiovasculares más comunes que suelen presentar, la insuficiencia cardíaca se sitúa como la más común. El hecho de que ambas patologías coincidan en factores de riesgo podrían explicar esta asociación
De hecho, la relación entre corazón y riñones es tan estrecha, que ha dado lugar al concepto de “síndrome cardio-renal”. Dicho término se utiliza para referirse a la disfunción que se da en ambos órganos a causa del trastorno de uno de ellos.
EPOC
La enfermedad pulmonar obstructiva crónica está presente en prácticamente 1 de cada 3 personas con IC. Inclusive, algunos estudios, han situado el riesgo de IC 4,5 veces mayor en personas con EPOC que en la población general. En el caso de pacientes con IC ya diagnosticada, la presencia de EPOC suele ser silente e inclusive imperceptible. La fatiga, la tos o la disnea son signos propios de la IC, pero además, son síntomas propios de la EPOC. Lo que provoca que en ocasiones la enfermedad pulmonar obstructiva crónica esté infradiagnosticada al asociar sus síntomas a signos propios de la IC.
[i] Feinstein AR. The pre-therapeutic classification of comorbidity in chronic disease. J Chron Dis. 1970;23:455-68. http://dx.doi.org/10.1016/0021-9681(70)90054-8